Las recetas de las croquetas son unas recetas muy socorridas que nos pueden ayudar mucho a la hora de aprovechar muchas de las sobras de otras comidas que por exceso, no hemos podido acabar. A casi todo el mundo le gustan las croquetas y las posibilidades son infinitas. Hoy nosotros aprovecharemos las posibilidades que nos ofrecen y haremos una receta muy sencilla: croquetas de brócoli.
Ingredientes
- Brócoli
- Harina
- Queso rallado
- Leche
- 2 huevos
- Mantequilla
- Pan rallado
- Ajo picado
- Nuez moscada
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Croquetas de brócoli
Si vamos a realizar la receta a partir de las sobras de brócoli que hayamos hecho antes, podemos pasar al siguiente paso, pero si vamos a empezar desde cero, lo primero que debemos hacer es poner a cocer en abundante agua el brócoli. Nosotros preferimos ponerlo a cocer cortado en grandes trocitos para que luego sea más fácil trabajarlo.
A continuación, debemos empezar con la bechamel. Para ello, colocaremos al fuego una cucharada de mantequilla, una cucharada de aceite de oliva virgen extra y un diente de ajo picado. Una vez empiece a calentar, añadimos la harina y removemos todos los ingredientes hasta formar una pasta homogénea.
Ahora añadimos poco a poco la leche, sin dejar de remover, añadiendo leche poco a poco hasta conseguir la textura y espesor que deseamos. Añadimos a esta mezcla la nuez moscada, la sal y el brócoli y removemos hasta que todos los ingredientes estén integrados; y finalmente, añadimos el queso rallado removiéndolo también para integrarlo.
Quitamos del fuego y colocamos sobre un bol de cristal amplio nuestra bechamel, para introducirla unas horas en la nevera, para que espese correctamente y poder trabajarla.
Para finalizar la receta, terminaremos preparando el rebozado. Batimos dos huevos y los colocamos en un platito hondo. En otro plato hondo colocaremos el pan rallado. Sacaremos de la nevera la bechamel y la trabajaremos con las manos o con ayuda de unas cucharas para hacer las croquetas con la forma deseada. Una vez hecha la forma de la croqueta, pasamos por el plato de huevo, y luego por el pan rallado, una a una, tantas veces como creamos necesario para que estén bien recubiertas.
Freímos las croquetas en una sartén con abundante aceite de oliva hasta que queden doradas y dejamos reposar en un plato con un papel de cocina para que absorva el sobrante de aceite.
Servimos recién hechas y adornamos con algún ramillete de perejil o albahaca.