Una receta sofisticada para añadir una nota dulce a nuestra mesa, su protagonista el chocolate en versión espuma. Atrévete a intentarlo y seguro que recibirás buenas críticas.
Ingredientes para unas cuatro personas
- 100 gr de chocolate negro
- 80 gr de chocolate blanco
- 60 gr de chocolate con leche
- 25 cl de nata líquida (en la nevera)
- 3 huevos enteros
- 2 claras de huevo
- 10 gr de azúcar glass
Preparando la receta de espuma de chocolates
Preparamos la espuma de chocolate negro. Fundimos en el microondas, o al baño maría, el chocolate negro con 5 cl de nata líquida y alisamos la mezcla con la ayuda de una espátula. En una ensaladera, batimos la yema de huevo con el azúcar glass y mezclamos muy bien todo.
Montamos tres claras a punto de nieve y que queden firmes y las añadiremos al chocolate con un movimiento de arriba hacia abajo para que no se bajen las claras. Pondremos la mezcla en el fondo de un baso y los metemos en la nevera durante una hora.
Preparamos la espuma de chocolate con leche. Derretimos el chocolate con leche y una vez frío añadimos las dos yemas que sobraban. Montamos las claras que quedaban al punto de nieve firme y las incorporamos a este chocolate.
Echamos esta segunda espuma en los vasos anteriores, sobre la espuma de chocolate negro que ya habrá cuajado en la nevera y los metemos de nuevo una hora más en la nevera.
Preparamos la espuma de chocolate blanco. Derretimos el chocolate blanco con una cucharada de nata líquida y alisamos. Batimos con las varillas (preferiblemente eléctricas) el resto de la nata y la incorporamos al chocolate blanco con cuidado de que no se baje. Añadimos esta espuma en los vasos y volvemos a meterlos en la nevera durante una hora más.
Nuestros vasitos de tres chocolates, los serviremos recién sacados de la nevera y los podemos acompañar con unos palillos o virutas de chocolate, también podemos espolvorear por encima con algunos pistachos o frutos secos molidos.